LAS GONDOLAS NEGRAS DE VENECIA

Fui a Venecia a iniciar un crucero por el Adriático e islas griegas. El primer día, fuimos del aeropuerto al barco. La salida desde Venecia con un crucero es fascinante, pues sin pisar la ciudad ya te quedas prendada. Hasta la vuelta, no pudimos pisar y vivir Venecia.

He estado en muchas ciudades de Italia: Roma, Florencia, Nápoles, Turín… Me encantan, me encanta Italia. Supongo que es por todo el patrimonio cultural que tiene, por el carácter mediterráneo (con el cual los españoles estamos tan a gusto), la comida, el ambiente y todo lo que puedas imaginar.

No sabría cual elegir de todas las ciudades italianas que he visitado. Me quedo con todas. Cada una tiene su encanto, su singularidad. Venecia es tan especial. Da nombre a todas las ciudades del resto del mundo que tienen canales. Una de sus singularidades son las góndolas. Las puedes ver en la televisión, en YouTube o en foto. La realidad supera todo lo que has visto. Son maravillosas. Su toque ovalada y alargada, su color negro, su “peine” o hierro de proa, y como no el gondolero. Ese tipo italiano que no defrauda en ningún momento. Puro carácter.

Hoy en día las góndolas son casi en su mayoría turísticas, pues los vaporetos y taxis-barco a motor son más rápidos y prácticos para la vida diaria. Pero Venecia sin góndolas es como España sin jamón, no se puede entender, pierde su encanto.

Mis fotos

Ahora que ya cuelgo mis fotos en las redes, y voy observando como es una buena foto, o por los perfiles que ves de otras personas que son profesionales, me doy cuenta de que mis fotos de principiantes son en muchos casos horribles. Desde un tiempo a esta parte, viajo disfrutando del momento. Ahora soy consciente que en el futuro debo captar mejor ese sentimiento. Soy aficionada y no era mucho de pensar en las luces y sombras de una buena fotografía. Prometo mejorar. A pesar de mis errores, en ocasiones, mi felicidad es tal, que sin saber ni pretender se produce el milagro. Capto el momento perfecto con una buena foto. Como mi foto de las góndolas.

En la foto vemos el contraste de las góndolas en negro y azul con la silueta al fondo de la iglesia de San Giorgio Maggiore.

Venecia es una de esas ciudades propicias para el amor. Una ciudad que enamora y un día como hoy, San Valentín, ¿que mejor para celebrarlo que darnos un paseo por Venecia?